Junto a CTERA repudiamos la agresión sufrida por una compañera militante de la agrupación HIJOS, quien fue atacada en su propio domicilio por dos individuos que ingresaron ilegalmente. Los atacantes sólo se llevaron documentos de la agrupación HIJOS, tras maniatar y abusar sexualmente de la compañera.
El hecho de extrema gravedad amerita el acompañamiento y el estado de alerta de todas las organizaciones sindicales, políticas, estudiantiles, barriales y populares del arco democrático. A poco más de 40 años de la recuperación del orden constitucional y en el marco de los discursos de odio, esto constituye una seria lesión a la convivencia democrática.
Nos solidarizamos con la compañera, su familia y las/os compañeras/os de la Red Nacional de HIJOS, poniéndonos a su disposición y acompañando el pedido de esclarecimiento inmediato de este hecho tan grave.
