En esta película, Daniel Lefebre, de 40 años, dirige una escuela infantil en un barrio marginal de Hernaing, población minera del norte de Francia. En el pequeño pueblo, el 30% de la población está en paro a causa de la crisis de la minería. Un día, la madre de una de las alumnas llega borracha a la escuela, sufre un colapso y dejá allí a su bebe y a su hija de cinco años. El profesor decide tomar cartas en el asunto y solicita la ayuda de la comunidad y de los padres de sus alumnos, pero lo único que conseguirá es que su trabajo como docente sea cuestionado.